El puesto de flores...

...resultó un poco caótico, en parte por nuestra puesta en escena, en parte por algunos/as adultos/as (pocas/os) que no tuvieron muy en cuenta ni la condición de quien les atendía, ni la generosidad en un acto que, además de una venta, era una actividad educativa abierta.
Muchísimas gracias a la gente que supo esperar con educación, sin atosigar a los/as vendedores/as y comprendiendo que ellos/as tenían preferencia puesto que todos/as habían trabajado en las decoraciones.
Otro año, si no cierran el ciclo formativo de jardinería en el Instituto Tomás y Valiente de Fuenmayor (que sería una pena), seguro que lo organizamos mejor...